Mi día de suerte....

 Hola a tod@s.

Nunca sabes que es lo que la naturaleza te tiene reservado cuando sales a campear por ella, hay días en que sin saber porque no ves casi nada o ves muy poco , en lo que a especies de fauna se refiere, sin embargo hay jornadas en que la diosa fortuna parece ponerse de nuestro lado y la panoplia de especies que puedes llegar a observar puede ser considerable. Pues bien aunque el Terruño no suele defraudarme nunca, hace unos días quiso mostrarme gran parte de esa biodiversidad que lo hace tan especial. Vi y afoté una cantidad de especies que no suele ser usual, vamos que fue mi día de suerte. Sin más paso a relataros como se desarrollo esta jornada , que como digo fue increíble. 

El día comenzó entre nubes y claros. A ratos lucía un sol impecable y sin embargo aveces el cielo se encapotaba por completo. Esto dificulta la fotografía por la luz, pero yo personalmente disfruto más con el reto de ir cambiando los parámetros de la cámara y adaptándolos a los caprichos de la meteorología.

Como siempre acostumbro a hacer en primer lugar me dirigí hacia la iglesia de mi pueblo con la intención de disfrutar de esos "halcones urbanos" que son nuestros cernícalos primilllas. Nada más llegar ya pude ver una pareja en los orificios de la vieja pared donde tienen instalados sus nidos.

Primilla Macho

Primilla hembra

La colonia cada año empieza a ser más numerosa hace relativamente poco tiempo constaba de un número de parejas que oscilaba entre cuatro y cinco. Hoy hay unas 18 u 19 parejas según mis observaciones. Verlos evolucionar en vuelo es toda una maravilla que recomiendo a todo aquel que tenga la suerte de tener una de estas colonias cerca.

Esta iglesia es una auténtica maravilla debido a la comunidad de aves que alberga. Los ubicuos estorninos cantan por doquier y tampoco falta el griterío de los vencejos que entran y salen de sus nidos, situados también en las oquedades de la antigua y majestuosa edificación.

Estornino Negro

Vencejo

También además de la pareja de cigüeñas y de las palomas bravías observé un cernícalo que no me pareció un primilla , cuando por fin pude verlo posado me di cuenta que efectivamente era un Cernícalo vulgar. Una pareja está criando entre la colonia de primillas. Es la primera vez que tengo constancia de que esto suceda en esta iglesia.

Cernícalo Vulgar

 

Más tarde me marche para perderme por esos campos de ese pedazo de tierra que tanto amo y tanto me da. Nada más salir del pueblo a unos 300 metros me tropecé con este macho de Mirlo común que me miraba con curiosidad desde una alambrada.

Macho de Mirlo Común

Después transitando por una zona de olivar, marchaba atento por que los mochuelos se dejan ver amenudo por el lugar. Efectivamente allí estaba mirándome fijamente desde su atalaya con esos ojos color limón que cuando los miras fijamente parecen quedarte petrificado.

Mochuelo Europeo

Continué ruta siempre atento a lo que veía desde mi coche. El siguiente en asaltarme fue un precioso ejemplar de Buitrón que se puso en lo alto de un arbusto y no pareció importarle mucho mi presencia ya que parecía la mar de tranquilo. Me concedió un par de tomas.

Buitrón

Tras mi encuentro con este duendecillo de nuestros campos vi un grupo de jilgueros aunque solo uno se dejo afotar. También me pareció ver algo entre un montón de ramas secas y entonces pude ver al zarcero común que se movía con rapidez y apesar de la maraña de palos pude obtener una foto. Unos metros más adelante apareció una de las numerosas liebres que se suelen ver por el Terruño.

Jilguero

Zarcero común

Liebre Ibérica

El día estaba siendo de lo más completito. Marchaba por una zona de cereal cuando divisé a una hembra de Aguilucho Cenizo que volaba sobre un trigal. Justo enfrente en un pequeño prado la Cigüeña Blanca campeaba en busca del pan suyo de cada día.

Hembra de Aguilucho Cenizo

Cigüeña Blanca

Más adelante marchaba ya con los abejarucos en el pensamiento cuando de repente salió a mi encuentro el Alcaudón Común que se posó en una alambrada y me permitió afotarlo. Entonces me fije en la presencia de otra avecilla en la misma alambrada y al acercarme comprobé que se trataba de una golondrina que incluso me ofreció algún que otro equilibrio.

Alcaudón Común

Golondrina común

Equilibrista

Me acercaba como decía a la colonia de abejarucos cuando un sonido familiar me hizo girar y decubrí a esta abubilla que me dedicó algunas notas musicales. Un concierto para mi solito y gratis.....

Abubilla

En Do mayor

Mientras circulaba por un camino paralelo a la rivera donde se encuentra la colonia de abejarucos pude afotar a una hembra de gorrión moruno y seguidamente a un Verderón. Sorpresa la mía cuando decubrí su pata totalmente atrofiada. No se que le habría ocurrido pero lo que esta claro es que el bicho lo que se dice afán de superación tenía bastante.

Hembra de Gorrión moruno

Verderón  Común

Después le toco el turno a la Cogujada Montesina y a una inquieta hembra de curruca cabezinegra que no paraba quieta un segundo buscando y rebuscando entre las oquedades de un viejo tronco caído.

Cogujada Montesina

Curruca Cabecinegra hembra

Pasando cerca de dicha rivera sorprendí una terrera que se alimentaba en el suelo y que casi no la veo debido al fantástico mimetismo de su plumaje con el suelo por donde gusta de moverse. En uno de los correntones pude fotografiar a este andarríos que también se mostraba nerviosillo.

Terrera Común

Andarríos Grande

Por fin llegue donde los abejarucos y disfrute fotografiándolos y observándolos. Ahora se ven menos y es debido a que las hembras se encuentran, la mayoría de ellas incubando la puesta. Pronto los cielos del terruño se llenaran con las voces de las nuevas generaciones de estas y otras aves que vendrán a traer sabia nueva a nuestros campos.

Abejaruco

Tras permanecer unos minutos en la colonia me marché rápidamente con el objetivo de no molestar mucho, ya que como os digo la incubación esta en todo su apogeo. El camino transcurre por una zona rica en conejos y en rapaces. No faltó a la cita el Águila calzada que siempre esta atenta al descuido de los lagomorfos y más de un despistado suele terminar en sus garras.

Conejo

Águila Calzada

Ya me marchaba mientras iba pensando en lo afortunado que había sido, no por observar tantas especies, que también, sino por el hecho de haber podido afotar a la mayoría de ellas.  Pero no acaba aún la cosa también pude fotografiar a un verdecillo que lucía unos colores espectaculares, a una pareja de Tarabillas Comunes que me dieron un buen momento y por último a un rutilante macho de pardillo que mostraba orgulloso su atuendo nupcial.

Verdecillo

Macho de Tarabilla

Hembra de tarabilla

Pardillo Común macho

Y por último y para despedir el increíble día que había tenido la fortuna de vivir un triguero vino a engrosar la lista de 28 especies que había tenido la suerte de fotografiar en una sola jornada algo que no me había ocurrido jamás y que no hace otra cosa que ratificar la diversidad de la maravillosa tierra en la que habito y en la que tienen lugar mis correrías. Ese mágico terruño que no por muchas veces visitado pierde un ápice de grandiosidad y de capacidad de sorprender. Estoy deseando ver con que maravillas lo hará en futuras salidas. y no os preocupeis porque vosotros , como siempre, seréis testigos de excepción.

Triguero